lunes, 28 de febrero de 2022

Ansiolíticos

 INTRODUCCIÓN

La ansiedad es un síntoma que puede presentarse formando parte de distintos cuadros psiquiátricos tales como episodios depresivos, maníacos, psicóticos, etc. Sin embargo, también puede constituir un síndrome en sí misma manifestándose como componente emocional, cognitivo y/o comportamental (palpitaciones, sudoración, tensión muscular, etc.) de distintos trastornos psiquiátricos como las crisis de angustia (panic aĥack), el trastorno de ansiedad generalizada y el trastorno por estrés postraumático entre otros. ( KATZUNG, B., 2002)

La ansiedad se convierte en patológica cuando adquiere la categoría de que, en lugar de favorecer el comportamiento, lo interfiere y el individuo desplaza su atención sobre ella; es decir, la convierte en la vivencia de un senĕmiento de amenaza, de expectación tensa ante el futuro y la alteración desproporcionada de un peligro no real o existente.

En la ansiedad existen varios componentes como:

a) senĕmientos de aprensión, temor, angusĕa frente algo que se valora como amenazante.

b) Estado de irritabilidad que puede llegar a la pérdida de la capacidad de concentración.

c) Conjunto de síntomas somáĕcos variables como: sudoración, palpitaciones, opresión precordial, faĕga, micciones frecuentes, cefalea, mialgias, insomnio, molesĕas digesĕvas, etc.

Los ansiolíĕcos son fármacos psicotrópicos (provocan cambios temporales en la percepción, ánimo, estado de conciencia y comportamiento del paciente) con acción depresora del sistema nervioso central, desĕnado a disminuir o eliminar los síntomas de la ansiedad sin producir sedación o sueño. Sin embargo existe una clara tendencia a considerar el efecto ansiolíĕco como el primer paso de una línea conĕnua de efectos progresivos: ansiolisis‐ hipnosis‐ anestesia‐ muerte. (FLORES, 2003)

La gran mayoría de medicamentos usados con este fin son las denominadas benzodiazepinas; las cuales actúan en el sistema nervioso central sobre el complejo ácido gamma‐aminobuėrico (GABA), potenciando su acción inhibitoria; se pueden administrar por vía oral y algunas de ellas por vía intramuscular e intravenosa.

Existen también fármacos no benzodiacepínicos con perfil ansiolíĕco y/o sedaĕvo como antihistamínicos (ej. difenhidramina), buspirona y barbitúricos. Estos últimos, desde que se dispone de benzodiazepinas, han dejado de uĕlizarse para el manejo de la ansiedad dado su bajo índice terapéuĕco y hoy su uso ha quedado limitado para anestesia intravenosa y como anticonvulsivantes (REMINGTON, 1998)

En este trabajo estudiaremos el mecanismo de acción del Diazepam; así como también determinaremos la dosis que produce un efecto ansiolíĕco sobre el Sistema Nervioso Central en ratones albinos empleando el modelo de Plus‐maze.

El Diazepam pertenece al grupo de las benzodiazepinas que como ya se mencionó actúan sobre el Sistema Nervioso Central, siendo los efectos más importantes de estos fármacos la sedación, hipnosis, menor ansiedad, relajación muscular y acĕvidad anĕconvulsivante. ( KATZUNG, B., 2002)

OBJETIVO

Estudiar y evaluar el efecto que produce el diazepam sobre el Sistema Nervioso Central (SNC) en ratones albinos, mediante el modelo del laberinto en cruz elevado (PLUS‐MAZE) y de esta manera definir la dosis que produce un efecto ansiolíĕco sobre nuestro modelo biológico de estudio.

HIPÓTESIS

Si se evalúa el efecto que produce un fármaco ansiolíĕco (Diazepam) sobre el Sistema Nervioso Central en nuestro modelo biológico de estudio (ratones albinos), mediante los distintos parámetros estudiados por el modelo PLUS‐MAZE ( espaciotemporales y etológicos); entonces determinaremos la dosis en la cual el modelo de estudio se encuentra bajo un efecto de baja ansiedad.

DIAGRAMA ECOLÓGICO


RESULTADOS



ANÁLISIS DE RESULTADOS
El test del laberinto en cruz elevado es un modelo para medir la ansiedad en roedores, el cual es ampliamente usado en el descubrimiento de nuevos agentes ansiolíĕcos además de protocolos enfocados en la invesĕgación de las bases tanto fisiológicas como neuroquímicas de la ansiedad. El modelo se encuentra fundamentado en las observaciones de Montgomery, las cuales indican que las ratas pasan menos ĕempo explorando los brazos abiertos de un laberinto elevado en forma de “Y” en comparación con los brazos cerrados del mismo.

En la actualidad este modelo presenta una forma de cruz y posee un par de brazos elevados abiertos y cerrados, respectivamente. Éste ha ganado una amplia aceptación debido a que: su ejecución resulta fácil y simple, el equipo que emplea es relativamente barato y dentro de algunos laboratorios permite la detección de fármacos considerados como ansiolíĕcos. Adicionalmente, es considerado etiológicamente válido debido a que emplea estimulos naturales que pueden inducir la ansiedad en humanos ya que se asume que los brazos abiertos del laberinto combinan tanto el miedo a un espacio nuevo altamente iluminado así como, el miedo a balancearse sobre una plataforma elevada; relativamente estrecha. En contraste, los brazos cerrados presentan muros elevados que forman un callejón angosto que confieren una sensación de protección contra depredadores potenciales. (Dawson, 1995)

Existen respuestas que son fácilmente evaluadas y cuantificadas con este modelo, siendo las más ėpicas el número de entradas y el tiempo de permanencia en brazos abiertos o cerrados. El comportamiento en esta prueba, como la acĕvidad en brazos abiertos, refleja el conflicto entre la preferencia del roedor por las áreas protegidas (brazos cerrados) y su moĕvación innata por explorar nuevos entornos (brazos abiertos). Por otro lado, el comportamiento ansiolíĕco descrito por un mayor ĕempo de permanencia en brazos abiertos así como un mayor número de entradas a los mismos puede ser determinado de manera simultánea con una medición de la actividad motora espontánea o dicho de otra forma, el número total de entradas a brazos cerrados aunque cabe mencionar que según lo reportado en la literatura, el número de entradas en los brazos puede no ser una medida ópĕma de la acĕvidad motora. Además, otras medidas etológicas que pueden ser observadas en roedores son inmersiones de cabeza, bolos fecales, bloqueos o posturas de esĕramiento. (Walf, 2007)

Ahora bien, durante la sesión experimental fueron empleados ratones albinos como modelo biológico para evaluar el comportamiento de ansiedad tras la administración del fármaco Diazepam. Como bien lo indica la literatura, éste pertenece al grupo de las benzodiazepinas las cuales actúan sobre el sistema nervioso central. De manera clínica, son empleados como sedantes y ansiolíĕcos o bien para el tratamiento de epilepsias, pánico y otro ĕpo de desórdenes. Las benzodiazepinas poseen una estructura común la cual incluye un anillo bencénico fusionado con un anillo diazepínico, es decir, una molécula heterocíclica con dos nitrógenos.
En cuanto a su farmacodinamia, se sabe que estos fármacos presentan como blanco principal el receptor GABAa, un canal iónico acĕvado por ligandos; específicamente acĕvado por el ácido γ‐aminobuėrico (GABA). La acĕvidad neuronal en el cerebro es regulada por entradas excitatorias así como acĕvidades inhibitorias además, la esĕmulación de la acĕvidad GABAérgica ya sea por ligandos endógenos, benzodiazepinas u otros fármacos, resulta en la sedación, amnesia y ataxia mientras que la atenuación de este mismo sistema da lugar a la excitación, ansiedad, inquietud, insomnio y reacĕvidad exagerada.
El neurotransmisor GABA es transportado dentro de vesículas y almacenado en la neurona presinápĕca y tras el arribo del impulso nervioso, estas vesículas estallan dando lugar a la liberación de GABA en la sinapsis donde se puede unir al receptor GABAa. De esta forma, la unión de ambos abre el canal, originando la conducción de los iones cloruro a través de la membrana neuronal por lo tanto se incrementa el potencial de membrana de la neurona lo cual hace más dificil la despolarización de la membrana y por ello la excitación de la célula, resultando en la inhibición de la descarga neuronal. Finalmente, el término de la señal GABAérgica se logra con la recepción de GABA a la célula sinápĕca por los transportadores de GABA siendo SLC6A1 y SLC6A11 los principales jugadores en la regulación de la neurotransmisión GABAérgica en el sistema nervioso. (Whirl‐Carrillo, 2012)
Habiendo descrito la farmacodinamia de las benzodiazepinas y por ende la del Diazepam, resulta posible el analizar las diferencias obtenidas tras la ejecución del modelo farmacológico plus‐maze”.

En primer lugar, como puede ser observado en la Gráfica 1, en comparación con el lote control, el porcentaje de entrada a brazo abiertos (%Eba) así como el porcentaje de ĕempo en brazos abiertos (%Tba) se vieron considerablemente aumentados, 46.70% y 12.60% respectivamente, bajo una dosis de trabajo de 3.54mg/kg. Con respecto a lo antes mencionado, la literatura menciona que en el modelo de laberinto en cruz elevado, el número total de entradas a los brazos es tomado como un índice de la acĕvidad locomotora. De esta forma, puede ser afirmado que la acĕvidad ansiolítica del Diazepam aumenta de manera directamente proporcional a medida que la dosis se incrementa debido a que durante el transcurso de la prueba los roedores permanecieron una mayor cantidad de tiempo y presentaron una mayor frecuencia de entrada a los brazos abiertos del laberinto. (Walf, 2007)
Otros parámetros que también fueron evaluados y que eran indicativos del grado de ansiedad en el que se encontraba cada ratón fueron el número de estiramientos y de bolos fecales. En la literatura se reporta que en general cualquier roedor que se encuentre en situación de estrés (por ejemplo cuando lo tomamos de la cola) defecará y tenderá a estirarse con mayor frecuencia; por lo que al comparar lo anteriormente expuesto con nuestros resultados (Tabla 2) pudimos darnos cuenta que en comparación con el lote control, el número de bolos fecales y de esĕramientos se vieron disminuidos bajo la dosis antes mencionada (3.54mg/kg) en la que los porcentajes de entrada a brazos abiertos y tiempo en brazos abiertos, se vieron aumentados.

De esta forma y considerando todos los parámetros evaluados se puede afirmar con mayor seguridad que la dosis que permitió que nuestros modelos biológicos (ratones albinos) estuvieran bajo un efecto de disminución en la ansiedad fue la de 3.54mg/kg.
Finalmente es importante mencionar que existen factores ambientales que influyen en los resultados obtenidos mediante este test; por ejemplo la luz, la temperatura y el ruido. En este caso nosotros trabajamos bajo una luz roja. Debido a que los roedores ĕenen solo dos tipos de conos (visión dicromática), su retina es únicamente sensible a la percepción de la luz verde y azul siendo que los demás colores son observados como matices de gris. De este modo, al emplear la luz roja resultó posible el observar el comportamiento de los roedores ya que estos presentaron la perspecĕva de encontrarse en condiciones de oscuridad lo cual fue un factor externo que bajo ciertas dosis del fármaco les ayudó a disminuir sus niveles de ansiedad. Por otra parte, se trató de reducir al mínimo la producción de ruidos ya que este factor externo presenta la capacidad de inducir condiciones de estrés en los roedores.

CONCLUSIONES
Por medio del modelo farmacológico de plus‐maze se logró evaluar la acción del fármaco diazepam bajo dos concentraciones disĕntas así como diferentes dosis, siendo posible el determinar que a mayores dosis, este ejerce un evidente efecto depresor del sistema nervioso central puesto que actúa como ansiolíĕco permiĕendo una observable disminución de los niveles de ansiedad en ratones albinos, siendo esta una variable medida en función de la permanencia y entrada a los brazos abiertos del laberinto en cruz elevado así como un notable descenso de otras conductas ligadas a la ansiedad como la defecación y las posturas de esĕramiento. De esta forma, se concluyó que la dosis de diazepam capaz de inducir un mejor efecto ansiolíĕco en ratones albinos fue de 3.54 mg/kg.

BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA
DAWSON, G. TRICKLEBAND, M. (1995) Use of the elevated plus maze in the search for novel anxiolytic agents. [en línea] Elsevier Science: Current Techniques. v. 16 Consultado el: 13 de febrero de 2016. Disponible en: hĥp://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/7762079
FLORES, (2003). Farmacología humana. Cuarta ed.,MASSON, 480 págs., Madrid‐España.
KATZUNG, B., (2002). Farmacología Básica y Clínica. 8 ° edición. Editorial Manual Moderno, 276 págs, Barcelona‐España.
REMINGTON, (1998). Farmacia. Décimo sépĕma ed. Médica Panamericana, 226 págs, Madrid‐ España.
WALF, A. FRYE, C. (2007) The use of the elevated plus maze as an assay of anxietyrelated behavior
in rodents [en línea] NIH: Nature Protocols; 2(2): 322–328. doi:10.1038/nprot.2007.44 Consultado el: 13 de febrero de 2016. Disponible en:
hĥp://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/arĕcles/PMC3623971/pdf/nihms452836.pdf
WHIRL‐CARRILLO, M. MCDONAGH, E. [et,al] (2012) "P harmacogenomics Knowledge for Personalized Medicine " Clinical Pharmacology & Therapeutics 92(4): 414‐417 .far

No hay comentarios.:

Publicar un comentario