domingo, 23 de mayo de 2021

Antibióticos

La eficacia clínica relacionada con un antibiótico depende de la utilización de una dosificación adecuada que permita alcanzar el parámetro farmacocinético/farmacodinámico (FC/FD) predictor de eficacia, la concentración que sea capaz de alcanzar al sitio de la infección, la presencia de biopelículas, etc.

Los parámetros FC/FD que predicen eficacia, y su aplicación a la determinación de los puntos de corte de sensibilidad/resistencia y a la dosificación de antimicrobianos hace aconsejable que al menos para determinados microorganismos, valores concretos de concentración inhibitoria mínima(CIM) y localizaciones específicas de infección, se proporcione el valor de la CIM.

El riesgo es modulado por el lugar de la infección, aumenta en sitios donde es difícil obtener altos niveles del antibiótico y se reduce en los sitios donde se concentra, y por el inóculo bacteriano.

Entre las fluorquinolonas conviene informar las más activas: ciprofloxacino en enterobacterias y moxifloxacino y levofloxacino en Streptococcus pneumoniae.


Es necesario adaptar la información al microorganismo y al lugar de la infección. Por ejemplo, en Salmonella no deben informarse aminoglucósidos ni cefalosporinas de primera y segunda generación, y solo en aislados extraintestinales alguna de tercera generación. Sin embargo, en aislados de heces sí sería necesario informar cotrimoxazol, del que habitualmente puede
prescindirse en el resto de enterobacterias.

Clasificación de los antibióticos:

Espectro

Amplio: aquellos antibióticos que son activos sobre un amplio número de especies y géneros diferentes. 

Reducido: antibióticos solo activos sobre un grupo reducido de especies.

Mecanismos de acción

Es el mecanismo por el cual un antibiótico es capaz de inhibir el crecimiento o destruir una célula bacteriana.
Inhibidores de la formación de la pared bacteriana
Inhibidores de la síntesis proteica
Inhibidores de la duplicación del ADN
Inhibidores de la membrana citoplasmática
Inhibidores de vías metabólicas

Farmacocinética y farmacodinamia

La susceptibilidad bacteriana se ha medido a través de pruebas in vitro, como la determinación de la concentración inhibitoria mínima (CIM). Este número luego era comparado con las concentraciones séricas o plasmáticas del antibiótico, alcanzadas con las dosis habituales del mismo. Esto no tiene en cuenta la farmacocinética o la farmacodinamia de cada antibiótico en particular. Cada clase de antibiótico es metabolizada en forma diferente por nuestro organismo. No es lo mismo un betalactámico, con escasa penetración celular, que un macrólido que se concentra a nivel intracelular. Esto es lo que llamamos farmacocinética: absorción, distribución, eliminación
Por otro lado está la farmacodinamia que intenta comprender las relaciones entre las drogas y sus efectos, tanto deseables (muerte bacteriana en nuestro caso) como indeseables. Los antibióticos pueden clasificarse de acuerdo a la forma en que producen la muerte o inhibición bacteriana en antibióticos tiempo dependientes y concentración dependientes. En el caso de los tiempo dependientes (betalactámicos y macrólidos) el éxito de la terapéutica viene dado por mantener concentraciones por encima de la CIM por el mayor tiempo posible interdosis (T por encima de CIM). En el caso de los concentración dependientes el éxito terapéutico viene dado por lograr un buen pico sérico de concentración (Pico/CIM) o un buen área bajo la curva (AUC/CIM), dependiendo de cada droga

Betaláctamicos:
Son un grupo de antibióticos de origen natural o semisintético que se caracterizan por poseer en su estructura un anillo betalactámico. Actúan inhibiendo la última etapa de la síntesis de la pared celular bacteriana. Constituyen la familia más numerosa de antimicrobianos y la más utilizada en la práctica clínica. Son compuestos de acción bactericida lenta, relativamente independiente de la concentración plasmática, que presentan escasa toxicidad y poseen un amplio margen terapéutico. Su espectro se ha ido ampliando a lo largo de los años por la incorporación de nuevas moléculas con mayor actividad frente a los bacilos gramnegativos; pero la progresiva aparición de resistencias adquiridas ha limitado su uso empírico y su eficacia en determinadas situaciones. 
El espectro de los betalactámicos incluye bacterias grampositivas, gramnegativas y espiroquetas. No son activos sobre los micoplasmas porque estos carecen de pared celular, ni sobre bacterias intracelulares como Chlamydia y Rickettsia. La resistencia natural de las micobacterias se debe a la producción de betalactamasas, probablemente unida a una lenta penetración por las características de la pared. Se pueden clasificar en cuatro grupos diferentes: penicilinas, cefalosporinas, monobactámicos y carbapenemes.

Cefalosporinas:
La mayoría son de administración parenteral, aunque existe un número creciente de formulaciones para vía oral como la cefalexina, cefradina, cefadroxil, cefuroxime axetil y otras. La absorción gastrointestinal de estos compuestos es buena. Se obtienen buenas concentraciones en líquidos biológicos y suero. No se obtienen buenas concentraciones intracelulares. Cefotaxime, ceftriaxona, cefoperazona y cefepime entran en el LCR alcanzando altas concentraciones. Todas las cefalosporinas, excepto cefoperazona de excreción biliar, se excretan primariamente por el riñón. Ceftriaxona tiene la vida media más larga (8 horas) lo que permite su administración 1 o 2 veces al día, mientras las demás tienen un esquema de dosificación cada 6 u 8 horas. 

Glicopéptidos:
Son antibióticos que actúan sobre la pared bacteriana. Actualmente hay 2 drogas en uso clínico: vancomicina y teicoplanina. La vancomicina es un antibiótico bactericida de espectro reducido (solo actúa sobre bacterias grampositivas), que se obtiene de Streptomyces orientales. 
Vancomicina es una opción terapéutica importante contra Staphylococcus meticilinorresistente de perfil hospitalario (SAMAR), Staphylococcus coagulasanegativos meticilinorresistentes, Corynebacterium JK (multirresistente) y Enterococcus resistente a los betalactámicos o a aminoglucósidos.
Se absorbe poco si se administra por vía oral. No se administra por vía intramuscular por el intenso dolor que causa en el sitio de inyección. La vancomicina tiene un gran volumen de distribución, alcanzando buenos niveles en fluídos biológicos como líquido pleural, ascitis y sinovial. Tiene una escasa penetración intracelular. Tiene una penetración variable a nivel del sistema central, aunque mejora cuando las meninges están inflamadas. Sin embargo, no se recomienda como tratamiento único para las meningitis bacterianas.

Aminoglucósidos:
Cuentan con dos o más aminoazúcares unidos por enlaces glucosídicos a un anillo aminociclitol. los únicos disponibles son: gentamicina, amikacina y estreptomicina para uso parenteral. La tobramicina se encuentra disponible en presentación para uso oftalmológico.
Son activos frente a los estafilococos, si bien Staphylococcus aureus y los Staphylococcus coagulasa negativos resistentes a la meticilina también lo suelen ser a los aminoglucósidos. Los enterococos son moderadamente resistentes a la gentamicina y la estreptomicina.
Son activos frente a Enterobacteriaceae y Pseudomonadaceae.
Se unen de forma irreversible a la subunidad 30S del ribosoma, interfiriendo la lectura correcta del código genético con el consiguiente bloqueo de la síntesis proteica de la bacteria.
Los aminoglucósidos presentan una escasa absorción oral y necesitan administrarse por vía parenteral.
Debido a su estructura polar, los aminoglucósidos penetran en pequeña cantidad en el interior de las células, excepto en las del túbulo proximal renal, donde estos antibióticos alcanzan una concentración superior a la plasmática. 
Los aminoglucósidos se excretan sin metabolizar fundamentalmente por vía renal (por filtrado glomerular), y en mínimas cantidades por la bilis.  La concentración alcanzada en orina es 25 a 100 veces superior a la plasmática y puede detectarse hasta semanas después de completar el tratamiento. El efecto antibacteriano de los aminoglucósidos depende de la concentración alcanzada, puesto que la capacidad bactericida está en relación con la concentración plasmática, o lo que es lo mismo, a mayor concentración, mayor poder bactericida.  La concentración plasmática máxima óptima necesaria para conseguir una actividad bactericida sobre los microorganismos debe ser al menos diez veces superior a la CIM. 
Los aminoglucósidos pueden causar nefrotoxicidad, ototoxicidad y bloqueo neuromuscular, y en menor medida exantemas cutáneos, fiebre por antibióticos, depresión medular, anemia hemolítica y antagonismo del factor V de la coagulación. 


Macrólidos:
LOs macrólidos (eritromicina, claritromicina, azitromicina), las lincosaminas (lincomicina y clindamicina), los cetólidos y las estreptograminas son antibióticos que comparten un mecanismo de acción similar pero tienen estructura diferente.
Los macrólidos que son antibióticos semisintéticos derivados de la eritromicina producida por Streptomyces eritreus. 
Se unen a la subunidad 50S del ARN ribosómico en forma reversible. La unión se realiza mediante la formación de puentes de hidrógeno entre diferentes radicales hidroxilo del macrólido y determinadas bases del ARNr. Esto provoca un bloqueo en las reacciones de transpeptidación y traslocación. 
La eritromicina está disponible en preparaciones tópicas, intravenosas y por vía oral. La claritromicina y azitromicina vienen en presentaciones vía oral e intravenosa. La absorción intestinal de eritromicina y azitromicina se ve disminuida en presencia de comida, por lo que su administración debe ser alejada de las mismas. Con excepción de azitromicina, todos se metabolizan en el hígado y sufren un efecto de primer paso que puede disminuir de manera significativa su biodisponibilidad. Difunden a través de la membrana debido a su carácter lipofílico y probablemente por la existencia de un transporte activo dependiente del calcio. La concentración en el citoplasma celular es varias veces superior a la sérica.  No son adecuados para infecciones urinarias.
Los efectos secundarios más frecuentes de los macrólidos, y especialmente de eritromicina, son las molestias gastrointestinales (dolor abdominal, náuseas y vómitos) debidas a la actividad procinética de la misma eritromicina, y en especial de sus metabolitos formados en el medio ácido del estómago.

Quinolonas:
antimicrobianos que derivan de una molécula básica formada por una doble estructura de anillo que contiene un residuo N en la posición 1. Diferentes sustituciones, incluyendo la inclusión de residuos de flúor, han derivado desde el ácido nalidíxico hasta las quinolonas fluoradas. Las quinolonas son antibióticos bactericidas y actúan inhibiendo la ADN girasa, enzima que cataliza el superenrollamiento del ADN cromosómico, que asegura una adecuada división celular.
Las quinolonas de primera generación (ácido nalidíxico y ácido pipemídico) tienen actividad sobre enterobacterias y son inactivas sobre grampositivos y anaerobios. Alcanzan concentraciones muy bajas en suero, su distribución sistémica es baja y solo se usan para casos de infecciones urinarias bajas por su buena concentración urinaria.

Las de segunda generación (norfloxacina y ciprofloxacina) son llamadas fluoradas, ya que incorporan un átomo de flúor y presentan mucho mayor actividad sobre gramnegativos. La ciprofloxacina es la quinolona con mejor actividad sobre Pseudomonas aeruginosa. Tienen una moderada actividad sobre grampositivos, son activas sobre gérmenes atípicos y no presentan actividad sobre anaerobios. En el caso de norfloxacina, las concentraciones en suero y tejidos son bajas, por lo que no se usa en infecciones sistémicas, siendo una buenea opción en el caso de infecciones urinarias no complicadas. 

Las de tercera generación (levofloxacina, gatifloxacina) retienen la actividad sobre gramnegativos y mejoran la actividad sobre grampositivos. Es importante su actividad sobre Streptococcus y especialmente sobre S. pneumoniae. Además tienen una muy buena actividad sobre gérmenes atípicos. 

Las de cuarta generación (moxifloxacina, trovafloxacina) retienen actividad sobre gramnegativos y aumentan la actividad sobre grampositivos, especialmente S. aureus y Enterococcus. Además agregan actividad sobre microorganismos anaerobios.  

La ADN girasa y la topoisomerasa IV. La primera es más sensible a la acción de las quinolonas en caso de gérmenes gramnegativos, mientras en grampositivos la más sensible es la topoisomerasa IV. Las quinolonas inhiben la síntesis de ADN y a concentraciones altas también la de ARN. Cuando interacciona con la ADN girasa, la inhibición ocurre rápidamente, mientras que cuando interacciona con la topoisomera IV la inhibición ocurre más lentamente. Este efecto es debido a la habilidad de las quinolonas de estabilizar los complejos de ADN y topoisomeras II. 

Las quinolonas son bien absorbidas luego de la administración por vía oral, mostrando una biodisponibilidad muy buena. Las concentraciones séricas alcanzadas con la administración vía oral son similares a las alcanzadas por vía intravenosa. La comida no afecta la absorción. Sin embargo, pueden interaccionar con cationes (calcio, aluminio, magnesio, etc.), lo que disminuye significativamente la absorción. Las concentraciones séricas máximas son bajas en el caso del ácido nalidíxico, pipemídico y norfloxacina. La unión a proteínas plasmáticas es baja y la vida media plasmática varía de 1,5 a 16 horas. Los más frecuentes son los gastrointestinales, que incluyen náuseas, anorexia, vómitos y dolor abdominal.
La ciprofloxacina o levofloxacina se reservan para el tratamiento de pielonefritis. Las fluorquinolonas se concentran en tejido prostático, por lo cual son de elección en el tratamiento de las prostatitis. la ciprofloxacina tiene buena actividad sobre patógenos causantes de gastroenteritis (Salmonella, Shigella y otros), y en aquella minoría de casos que requiere tratamiento se ha mostrado eficaz. 


















Referencias:

¿Qué antibióticos debemos informar en el antibiograma y cómo?
Juan-Ignacio A. y Jesús Rodríguez-Baño.

Grupos sanguíneos

Landsteiner descubrió que los individuos podían ser agrupados en A, B, AB u O de acuerdo a la presencia (grupos A, B, o AB) o ausencia (grupo O) de antígenos fuertemente inmunogénicos en la superficie de los glóbulos rojos. También demostró la existencia de anticuerpos (aglutininas) dirigidos contra los antígenos A y B y que el suero de un individuo no contiene anticuerpos para el antígeno presente en sus propios glóbulos rojos pero sí contra los que no posee

Todas estas observaciones revelaron la importancia de la compatibilidad ABO en la práctica transfusional.

Para la toma de muestra sanguínea, pueden emplearse como anticoagulantes: EDTA, heparina, ACD (ácido cítrico, citrato, dextrosa), CPD (citrato, fosfato, dextrosa) o CPDA-1 (citrato, fosfato, dextrosa, adenina).



Precauciones: 

Neonatos: los antígenos A y B no se encuentran totalmente expresados en el recién nacido

Aglutininas frías: en presencia de aglutininas frías, el lavado de los glóbulos rojos 4-6 veces con solución fisiológica, resulta generalmente suficiente para obtener células aptas para la tipificación. En muy raras ocasiones se requiere un calentamiento a 37oC durante 10 minutos antes de los lavados mencionados. Como control, se coloca una gota de estas células con 2 gotas de solución fisiológica. No debe producirse aglutinación.


jueves, 1 de abril de 2021

Acinetobacter baumannii

Pertenece a un grupo heterogéneo de bacterias encontradas en una amplia variedad de huéspedes animales. El género Acinetobacter consisten en coco-bacilos Gram negativos, aerobios estrictos, oxidasa negativos, catalasa positiva, no móviles, nitrato negativos, glucosa positiva, metabolismo oxidativo y no fermentadores de azúcares; son difíciles de decolorar y frecuentemente se arreglan en pares, crecen en medio de MacConkey, crecen a 41° y 44° C.

En la fase de crecimiento estacionaria sobre medios no selectivos las formas cocobacilares son más predominantes mientras que en la fase temprana de crecimiento en medios con antimicrobianos contra pared bacteriana producen formas bacilares.

El género se divide en 21 genoespecie y de éstas tan solo 17 se pueden separar por pruebas bioquímicas en laboratorios especializados.

Anteriormente se encontraban ubicados dentro de la familia Neisereaceae.

Actualmente con el uso técnicas de hibridación del DNA se encuentran formando parte de la familia Moraxelaceae

Son importantes como patógenos oportunistas, causan infecciones intrahospitalarias y presentan multirresistencia a los antimicrobianos. Presenta resistencia intrínseca a Amoxicilina, Ampicilina, Ertapenem, Aztreonam, Trimetoprim, Cloranfenicol y Fosfomicina.

Presenta mecanismos de resistencia como betalactamasas, sobreexpresión de bombas de expulsión, pérdida de porinas y modificación del sitio blanco de los antibióticos.

Tienen mecanismos de resistencia intrínseca tales como una enzima cefalosporinasa tipo AmpC no inducible denominada ADC (Acinetobacterderived cefalosporinase) siendo este el mecanismo de resistencia más frecuente de esta bacteria a los betalactámicos.

A. baumannii tiene hiperproducción de ADC y cuando esta se expresa en bajo
nivel confiere resistencia a ampicilina sin embargo cuando está sobre expresada produce
resistencia a cefalotina, piperacilina, cefotaxima y Aztreonam sin afectar carbapenémicos ni cefepime. Algunas han sido consideradas como AmpC de espectro extendido por lo que pueden hidrolizar también cefepime.

Otro mecanismo es la presencia de la oxacilinasa Oxa-51 cuya expresión basal hidroliza débilmente penicilinas y carbapenémicos.

Mecanismos de resistencia adquiridos son de tipo enzimáticos, la degradación del betalactámico mediada por diferentes tipos de betalactamasas los cuales pueden estar en elementos genéticos móviles como integrones, plásmidos y transposones.

Aminoglucósidos: Enzimas modificantes de aminoglucósidos y bombas de expulsión confieren resistencia a este grupo de antibióticos.

Quinolonas: Está mediada por mutaciones de los genes gyrA y parC que codifican para las subunidades A de la ADN girasa y la topoisomerasa IV, respectivamente.

Tetraciclinas: Esta resistencia está mediada por bombas de expulsión y proteínas de protección ribosomal.

Colistina: la resistencia a sido asociada a los genes pmrA y pmrB que originan cambios en genes relacionados con la modificación del lípido A, con la pérdida o deficiencia de la producción de lipopolisacáridos y con la modificación de la porina OmpW.

Trimetoprim, sulfonamidas y cloranfenicol: La resistencia a sulfonamida está mediada por el gen sul. El gen dhfr confiere resistencia a trimetoprim, mientras que la bomba de expulsión CraA confiere resistencia a cloranfenicol.

Referencia bibliográfica:
EUCAST Clinical Breakpoint Tables v:8.0, 2018-01-01
CLSI 2018, M100, 28th Edition, 296pp

domingo, 7 de marzo de 2021

Serratia marcescens

En el Manual de Edwards y Ewing las enterobacterias se dividen en tribus, de esta forma S. marscecens pertenece a la tribu V, Klebsiellae, la cual está integrada por 4 géneros: Klebsiella, Enterobacter, Hafnia y Serratia.

El género Serratia presenta 8 especies reconocidas, de las cuales S.marscecens es causa frecuente de infecciones intrahospitalarias, inclusive descritas en México. Estas infecciones nosocomiales se refieren principalmente a neumonías, septicemias, meningitis, infecciones de vías urinarias e infecciones de heridas. También se asocia específicamente a infecciones en adictos a heroína. Se aísla de suelo y de agua y a diferencia de otras enterobacterias ésta tiene baja capacidad de colonización en intestino, aunque un poco más en vías respiratorias y urinarias. 

Sólo un porcentaje bajo de cepas son cromógenas, y de los biotipos, sólo aquellos no cromógenos representan un riesgo en los hospitales. Para S. marcescens hasta el momento se reconocen 24 antígenos “O”, con los que se han logrado tipificar algunas cepas, y 26 “H”.

Las especies de Serratia se aíslan empleando medios de cultivo de baja selectividad como el agar MacConkey o el agar EMB, los cuales se incuban a 37ºC durante 24 h. Los miembros del género son móviles, crecen en medio de Citrato de Simmons y en caldo KCN, licuan la gelatina, la mayoría no fermenta la lactosa y produce un pigmento color rojo (la prodigiosina) y crecen bien a temperatura ambiente. Inclusive algunos autores han aprovechado su capacidad de producir exoenzimas como la DNasa, lipasas, enzimas que hidrolizan el tween-80 para la diferenciación con el resto de las enterobacterias. S. marcescens no fermenta la L-arabinosa a diferencia del resto de todas las especies de la tribu Klebsiellae, lo cual puede ser empleado en su identificación. 

Existe la necesidad de diferenciar a las especies de Serratia, ya que la presentación clínica de la infección, la patogenia, la sensibilidad a diversos microbianos y la epidemiología son diferentes. La diferenciación basada en pocas pruebas conlleva con frecuencia a reportes erróneos por el laboratorio clínico, por lo que es necesario emplear una serie de pruebas complementarias.


Las pruebas para la identificación de  Serratia marcescens son: 

Indol (-),  Rojo de Metilo (v), H2S (-), Urea (-), fenil alanina (-), Arginina deshidrolasa (-), Lisina descarboxilasa (+), Ornitina descarbosilasa (+), Lactosa (-), Sorbitol (+), Arabinosa (-), Adonitol (v), Arabitol (-), pigmento amarillo (-), pigmento rosa o rojo (v), movilidad (+), Voges-Proskauer (+), DNAsa (+), citrato de Simons (+), hidrólisis de la gelatina (+), no producen ácido de la ramnosa, rafinosa y arabinosa.

Enterococcus faecalis

Enterococcus faecalis es un coco Gram positivo y catalasa negativo, se encuentra en el suelo, en alimentos, agua y como flora normal de animales, pájaros y humanos. 

El género Enterococcus estuvo incluido dentro del género Streptococcus hasta antes de los 80s del siglo pasado, pero que a la fecha ya no debe ser considerado como tal sino como Enterococccus. Las especies más comúnmente asociadas con infecciones son: Enterococcus faecalis y Enterococcus faecium; forman parte de la flora normal del aparato gastrointestinal en humanos.

Frecuentemente la transmisión se efectúa por la penetración de cepas endógenas a sitios estériles. Existe transmisión de persona a persona, directamente o por equipo médico contaminado, se tiene también la diseminación nosocomial y colonización con cepas resistentes a múltiples drogas. Una vez que hay colonización, los pacientes comprometidos tienen riesgo de desarrollar infecciones con cepas resistentes.

La mayoría de las infecciones causadas por estas bacterias son intrahospitalarias e incluyen infecciones del aparato urinario, bacteriemia, endocarditis, infecciones mixtas de abdomen y pelvis, heridas, y ocasionalmente, infecciones oculares. Las infecciones del sistema nervioso central y del aparato respiratorio son raras.

Las pruebas bioquímicas que caracterizan a la cepa de Enterococcus faecalis, son: catalasa (-), oxidasa (-), no móviles, crecimiento aerobio y anaerobio, producen ácido de la glucosa y tienen un metabolismo fermentativo; Bilis Esculina (+), alfa hemólisis (alfa, beta o no hemolítico), crecimiento en NaCl 6.5% (+), CAMP (-), Bacitracina Resistente, Optoquina Resistente, urea (-), coagulasa (-), lactosa (-), PYR (+), crecimiento a 45ºC (+), hidrólisis del hipurato (+), arginina (+), acido de piruvato (- ) y acido de arabinosa (-). Estas pruebas son características del grupo fenotípico II que agrupa a las especies E. faecalis, Lactococcus sp., E.faecium, E.casseliflavus, E.mundtii y E.gallinarum.

La resistencia adquirida a betalactámicos se debe a la hiperproducción o a alteraciones en la PBP5. La resistencia de alto nivel a aminoglucosidos (RAN) se debe a la producción de enzimas inactivantes de estos antibióticos y anula el efecto sinérgico con agentes activos en la pared celular. La enzima más frecuente es la AAC(6’)-APH(2”), que inactiva a todos los aminoglucósidos más frecuentemente utilizados en la práctica clínica. La resistencia adquirida a glucopéptidos se debe a la adquisición de operones de resistencia denominados vanA, vanB, vanD, vanE, vanG, VanL, vanM y vanN. La resistencia a linezolid se debe a mutaciones ribosómicas o a la adquisición del gen cfr. Algunas cepas presentan sensibilidad disminuida a la daptomicina.

Presentan una moderada sensibilidad a las penicilinas y son resistentes intrínsecamente a todas las cefalosporinas, trimetoprim/sulfametoxazol, Aztreonam, Polimixina B/ colistina y Ácido nalidixico, clindamicina y a concentraciones terapéuticas de aminoglucósidos.

En las guías internacionales de Eucast y CLSI los antibióticos recomendados para probar son Penicilina, Ampicilina, Tetraciclina, Ciprofloxacina, levofloxacina, nitrofurantoina o fosfomicina como primera elección para tratar infecciones de vías urinarias por E. faecalis.


Citas bibliográficas:
EUCAST Clinical Breakpoint Tables v:8.0, 2019-01-01
Cercenado, E. (2011). Enterococcus: Resistencia fenotípicas y genotípicas y epidemiología en España. Enferm Infecc Microbiol Clin. 29(Supl 5):59-65.

Metylobacterium sp.

Según el Manual Bergey de Bacteriología Sistemática, su clasificación se encuentra en el Filum Proteobacteria, Familia Metylobacteriaceae, Género Metylobacterim y con 23 especies reconocidas.

Son bacterias Gram negativas, aunque algunos la informan como Gram variables, son móviles, aerobios estrictos ya que no crecen en anaerobiosis, son catalasa y oxidasa positivos, no producen ácido de la glucosa y su metabolismo es oxidativo; utilizan compuestos de 1, 2y 3átomos de carbono.

Son bacterias de crecimiento lento, crecen en medios como agar sangre, agar soya tripticaseína,  pero no crece en medios para enterobacterias, llegan a producir pigmento rosa en medios simples; presentan cierta dificultad en su identificación con las técnicas manuales e incluso con algunos que utilizan equipos automatizados de identificación; el análisis del RNA ribosomal 16S es bastante efectivo pero tardado y el método más recomendado es el de Espectrometría de Masas con controles de referencia.

Estas bacterias se han aislado en pies y boca de personas sanas, así como de suelo, plantas, agua dulce y soluciones antisépticas y otras superficies en hospitales; se han encontrado como causantes de infección intrahospitalaria en pacientes con VIH y cáncer mamario.

Streptococcus pyogenes

 S. pyogenes se ha encontrado en más del 80% de los casos con infección estreptocócica y puede ocasionar erisipela, si la puerta de entrada es la piel, con edema masivo indurado y márgenes que avanzan rápidamente. Si los estreptococos penetran en el útero después del parto, se presenta fiebre puerperal, que es fundamentalmente una septicemia originada a partir de una herida infectada. Se puede producir una infección generalizada por contaminación de heridas traumáticas o quirúrgicas por estreptococos, dando por resultado septicemia estreptocócica o bien escarlatina quirúrgica.

Además de las infecciones invasivas antes mencionadas, puede producir infecciones locales como: faringitis estreptocócica y pioderma estreptocócico, endocarditis infecciosa, aguda y subaguda. También son importantes la fiebre reumática y la glomerulonefrítis, como enfermedades pos estreptocócicas.

Streptococcus pyogenes se caracteriza por ser un coco Gram positivo, producir hemólisis beta, pertenecer al grupo A de Lancefield, catalasa (-), sensible a la Bacitracina (S), pirrolidonil amino peptidasa (PYR) (+), Voges Proskauer (VP) (-), CAMP (-) e hidrólisis de hipurato (-).

La penicilina y ampicilina son los antibióticos de elección para tratamiento de infecciones por estreptococos beta hemolíticos.


Citas bibliográficas:
EUCAST Clinical Breakpoint Tables v:8.0, 2019-01-01
CLSI 2019, M100, 29th Edition, 282pp

Streptococcus

 El género de los Streptococcus se encuentra formado por un grupo heterogéneo de bacterias Gram positivas, en forma de cocos que originan cadenas en su desarrollo, no existe un sistema apropiado para clasificarlas, presentándose en una amplia variedad de huéspedes animales. Este grupo está en la Sección 12 del Manual de Bergey de Bacteriología Sistemática. 

Dos de las clasificaciones más comunes son: 

1) La clasificación de Brown considera que muchos estreptococos pueden causar hemólisis de grado variable de los eritrocitos in vitro. La destrucción completa de los eritrocitos con liberación de hemoglobina se denomina hemólisis beta. La lisis incompleta de los eritrocitos con formación de pigmento verde se denomina hemólisis alfa. La ausencia de hemólisis se denomina hemólisis gamma.

La clasificación de Lancefield toma en cuenta la propiedad serológica de la sustancia específica de grupo de la pared celular y de otros antígenos capsulares o de la pared celular, y van del grupo A al U. 

Streptococcus disgalactiae produce hemólisis beta y tiene dos grupos serológicos, una colonia pequeña que corresponde al grupo C y otra colonia grande que corresponde al grupo G, da negativa la producción de la pirrolidonil arilamidasa (PYR), el Voges-Proskauer (VP) es negativa y la prueba de CAMP es negativa, en donde se verifica la presencia de una proteína extracelular o factor CAMP, que actúa sinérgicamente con la beta-lisina de S. aureus; causando una lisis amplia de los glóbulos rojos dando la imagen de una punta de flecha.

La hidrólisis de hipurato la da negativa, no hidroliza la esculina y la catalasa es negativa;

Streptococcus disgalactiae ssp equisimiles, puede aislarse de animales y de humanos que se diferencian por producir ácido de trealosa y no de sorbitol. El modo se transmisión en adultos es incierto, pero probablemente involucra el paso de bacterias endógenas que acceden a sitios estériles del organismo.

La penicilina y ampicilina son los antibióticos de elección para tratamiento de infecciones por estreptococos beta hemolíticos.


Citas bibliográfica: CLSI 2020, M100, 30th Edition, 294pp

miércoles, 24 de febrero de 2021

Aeromonas hydrophila

Pertenece a la familia Vibrionaceae integrada por los géneros Vibrio, Aeromonas y Plesiomonas, mismos que se incluyen en la Sección 5 del Manual de Bergey de Bacteriología. 

Son bacilos cortos Gram negativos, presentan metabolismo fermentativo, utilizan glucosa como única fuente de carbono y energía, reducen nitratos a nitritos, son catalasa y oxidasa positiva, móviles por medio de un flagelo polar y son capaces de crecer en un intervalo amplio de temperatura, pudiéndolo hacer las especies mesófilas entre los 0 y los 45ºC, crecen en agar MacConkey y en agar sangre.

Las Aeromonas son ubicuos de medios acuosos alrededor del mundo, incluyendo agua fresca, contaminada o con cloro, agua dulce o aguas marinas, donde infectan a animales incluyendo anfibios, reptiles y pescados. 

En humanos se encuentran asociados comúnmente con infecciones de heridas traumáticas adquiridas cerca o en el agua. La transmisión también se efectúa por medio de alimentos contaminados, lácteos, carnes y mariscos. Han sido recuperadas de sangre, líquido cerebroespinal, exudados de otitis media, orina, fluido peritoneal, músculo necrótico, válvulas infectadas de corazón y hueso. Sin embargo, la gastroenteritis es la infección más común asociada con este microorganismo. 

Presenta resistencia intrínseca a Ampicilina, Amoxicilina/clavulanato y cefazolina. La resistencia a los antibióticos es debido a que posee múltiples y distintas enzimas β-lactamasas de tipo inducible, además adquiere este tipo de enzimas de otros géneros bacterianos, la resistencia a cefalosporinas puede surgir por la terapia empírica con antibióticos betalactámicos, la importancia de la carbapenemasa producida por algunas cepas no se comprende completamente. Se han observado fallas en el tratamiento con elevadas MICs en Ciproproxacino susceptible. 

El uso de tratamiento antimicrobiano esta sugerido en sitios extraintestinales donde el empleo de cefalosporinas de tercera, de cuarta generación, así como las fluoroquinolonas y trimetoprim con sulfametoxazol cobran importancia

Las pruebas bioquímicas para la identificación  de Aeromonas hydrophila:



Crecimiento de Aeromonas hydrophila en agar CLED

Crecimiento de Aeromonas hydrophila en agar Salmonella Shigella

Crecimiento de Aeromonas hydrophila en agar Mueller Hinton

Crecimiento de Aeromonas hydrophila en agar Bilis esculina

Crecimiento de Aeromonas hydrophila en agar Mac Conkey

Crecimiento de Aeromonas hydrophila en agar Cromogénico para enterobacterias 

Crecimiento de Aeromonas hydrophila en agar Sangre. Es hemolítica.



Del Valle de T.A., Santos P., J.L., Navarro M., J.M., Gutierrez F., J. Descripción de datos clínico epidemiológicos de pacientes pediátricos con diarrea por Aeromonas spp. y estudio de la sensibilidad antibiótica de dicho agente. Rev Argent Microbiol.2020; 52(1):22-26.